El Diputado del Común y el Adjunto Primero se reunieron con el eurodiputado, Gabriel Mato, para dialogar sobre el papel de la Unión Europea en el problema migratorio de Canarias
Mato señala que ha habido “una solidaridad de pancarta” por parte del Gobierno de España
Tras la pasada reunión mantenida entre el Diputado del Común, Rafael Yanes, y el eurodiputado, Juan Fernando López Aguilar, para abordar las líneas de trabajo de la Unión Europea en cuanto a la Migración en Canarias; Yanes y el adjunto primero, Felipe Afonso, se han citado con el también eurodiputado y miembro de la Comisión de Comercio Internacional, Gabriel Mato, con el fin de seguir profundizando en la cuestión migratoria del Archipiélago y en la perspectiva europea.
El Diputado del Común ha señalado que mediante estas reuniones conocerá las iniciativas que va a tomar el Parlamento Europeo en cuestión migratoria, y tendrá constancia del debate actual que existe en torno al nuevo pacto de Migración y Asilo en el Parlamento Europeo.
Para el eurodiputado, la dimensión de este problema “es enorme”, ya que “hablar de migración es hablar de personas: de miles de personas que mueren en el intento de buscar una vida mejor, y de muchas otras que están sometidas a mafias”. En este sentido, aseguró que se debe acudir a Europa, pero “con los deberes hechos” y “desde luego, España no ha hecho los deberes en materia de migración”.
Así, resaltó los casos de “hacinamiento” de migrantes en el muelle de Arguineguín y el traslado de estos a “campamentos en los que se cuestionan las condiciones en las que están e, incluso, si se están respetando todos los derechos”, así como a veces “el impedimento de la visita de estos centros”.
Se habló de solidaridad y responsabilidad, para lo que Mato afirmó que debe existir “una solidaridad obligatoria” y que no sea “de pancarta, como ha hecho el Gobierno de España, sin lugar a dudas”, que señaló como un mal ejemplo en la acogida de migrantes.
Asimismo, el eurodiputado reconoció que “Europa no ha afrontado el tema con decisión, y ha hecho cosas bien y mal, pero, en todo caso, insuficiente”, y afirmó que debe existir, en primer lugar, una “inversión” en los países de origen y tránsito. Para Mato esta es la primera fórmula que habría que aplicar, aunque destacó que “no va a ser fácil” debido a que los intereses de los países que “están en primera línea receptora, como España”, no son los mismos que el de otros países europeos “que quieren que no les molesten y que se busquen fórmulas, pero sin que les afecte a ellos en exceso” o, por otro lado, “aquellos países que quieren poner fronteras”.